Hago una reflexión sobre la niñez y el trato que debemos dar a nuestros hijos si han sido víctimas de nuestra violencia.
Si queremos la paz debemos cultivar la justicia. Sin justicia, sin equidad nunca viviremos en paz y como la paz perfecta no existe he invitado a que minimicemos la guerra.
El último sábado abril celebramos el día de la niñez y debemos renovar nuestro compromiso de garantizar a los niños y niñas y en especial a nuestros hijos la vida, la salud, la educación, el derecho a pertenecer a una familia, a estar protegidos de la violencia, a no ser discriminados y a que se escuchen sus opiniones.
Recordemos que EL PRIMER DERECHO DE LOS NIÑOS es a no ser concebidos si los padres, la sociedad y el Estado, de manera solidaria, no cuentan o realmente esperan contar, con recursos para satisfacer las necesidades básicas de orden físico, mental, espiritual, social, afectivo, educativo, sanitario, alimentario, que requieren los seres humanos para tener futuro con por lo menos el mínimo de calidad de vida.